La defensa del río Renaico se ha desarrollado desde diversos territorios, dentro de la comuna de Renaico el Colectivo Social Salvemos el río Renaico junto a organizaciones vecinales, principalmente entre los años 2016 y 2019 se opusieron a la construcción del proyecto hidroeléctrico de pasada Agua Viva [1].
Las movilizaciones efectuadas por organizaciones sociales, juntas de vecinos, sindicatos y comunidades Mapuche situadas de las comunas de Collipulli, Mulchén, Angol y Renaico desembocaron además en la conformación del Movimiento por la Defensa del río Renaico el año 2019, previo a la revuelta social que inició el 18 de octubre del mismo año en la región chilena.
[1] Información detallada de este proyecto en “Amenazas río Renaico”.
El Colectivo Social Salvemos el río Renaico realiza talleres medioambientales para niños y niñas, en estos talleres los pequeños son incentivados a dibujar la flora y fauna del río y los problemas ecológicos que lo afectan. Presentamos algunos de estos dibujos que fueron especialmente realizados para la colección del Museo.
El río Renaico es parte de lo que la ecología denomina como “bosque templado”. Este tipo de bosque se ubica en zonas de clima templado en ambos hemisferios (norte y sur) del Planeta, es decir: fuera de las zonas tropicales. Se caracterizan por tener abundantes precipitaciones y temperaturas bajas durante el invierno. Durante el verano, las temperaturas son cálidas y se producen precipitaciones menores. En Chile hay una gran diversidad de bosques templados, que se ubican desde la Región del Maule a la Patagonia (Regiones de Aysén y Magallanes). Ejemplo de ello son los bosques espinosos en la zona central, los bosques caducifolios por donde fluye el río Renaico. Allí se encuentran especies como el coigüe (Nothofagus dombeyi), el roble (Nothofagus obliqua) y el raulí (Nothofagus alpina). En el nacimiento del río Renaico se produce un tipo específico de bosque templado: el bosque caducifolio andino, donde se encuentran especies como la Araucaria araucana – a la que comúnmente conocemos como araucaria o por su nombre en mapudungun: pehuén.
Una característica importante del bosque templado en esta región del continente es que existe una gran cantidad de especies endémicas – es decir, cuya existencia natural se limita a este territorio específico. El 90% de árboles y arbustos, el 50 % de peces de agua dulce y el 76 % de anfibios presentes en estos bosques son especies que surgieron en esta región y/o no existen en otros lugares del planeta (1). Los bosques templados que se encuentran en Chile son además considerados como hotspots o puntos calientes de biodiversidad (2); o sea: lugares donde se encuentra una gran riqueza de especies bajo amenaza.
Los bosques cumplen un rol importante en el ciclo del agua. Las raíces de los árboles filtran sedimentos, evitando así que estos se acumulen en el fondo de los ríos y que el agua se contamine. Al mismo tiempo, esto hace posible que el agua circule libremente hacia los mantos acuíferos, transportando nutrientes que mantienen al suelo fértil. Las raíces son también barreras naturales que evitan que el suelo cercano a las riberas de los ríos se erosione, como sucede cuando hay una tormenta de lluvia. Por otra parte, los bosques propician la lluvia a través de la evapotranspiración (3), o sea la evaporación de las masas de agua (océanos, ríos, lagos, etc.) y la transpiración de las mismas plantas. Este proceso es determinante para el balance hídrico, la humedad y la regulación del clima.
En lo que se refiere a la vida humana, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) informó durante el 2022 que “los ecosistemas forestales y montañosos sirven como áreas de origen para más del 75% del suministro de agua renovable, abasteciendo de agua a más de la mitad de la población mundial” y que “las principales cuencas hidrográficas que experimentan una pérdida de cobertura arbórea superior al 50% corren un mayor riesgo de erosión, incendios forestales y estrés hídrico de base.” (4)
Las especies nativas que existen en el Renaico son las siguientes: Bagre (Diplomystes nahuelbutaensis), Bagre (Diplomystes. Camposensis), Bagre grande (Nematogenys inermis), Bagrecito (Bullockia maldonadoi), Bagrecito (Trichomycterus areolatus), Carmelita (Percilia gillissi), Cauque (Odontesthes mauleanum), Farionela (Aplochiton taeniatus), Farionela listada (Aplochiton zebra), Lamprea de agua dulce (Mordacia lapicida), Pejerrey del Loa (Basilichthys semotilus), Pocha de los Lagos (Cheirodon galusdae), Pocha del sur (Cheirodon australe).
Las especies no nativas que existen en el Renaico son las siguientes: Chanchito (Australoheros facetum), Gambusia (Gambusia spp), Doradito (Carassius carassius), 10 manchas (Cnesterodon decemmaculatus), Pez gato (Ameiurus nebulosus), Overito o Morraja (Jenynsia multidentata), Pocha o Morrajita (Cheirodon interruptus), Carpa china (Ctenopharyngodon idella), Carpa (Cyprinus carpio)
Perca Trucha (Percichthys trucha) Dibujo a lápiz por Daniela Fuentes
Comunidad de mamíferos
En la comunidad de mamíferos se encuentran especies como: huemul (Hippocamelus bisulcus), ratón lanudo común (Abrothrix longipilis), gato colocolo (Leopardus colocolo), ratón topo del matorral (Chelemys megalonyx), ratón topo valdiviano (Geoxus valdivianus), ratón de pie chico (Loxodontomys micropus), tunduco común (Aconaemys fuscus), pudú (Pudu puda), puma (Puma concolor), zorro culpeo (Lycalopex culpaeus), guiña (Leopardus guigna), chingue común (Conepatus chinga), quique (Galictis cuja), monito del monte (Dromiciops gliroides), viscacha de montaña (Lagidium viscacia), rata arbórea (Irenomys tarsalis), ratón olivaceo (Abrothrix olivacea), coipo (Myocastor coypus), degú de los matorrales (Octodon bridgesii), zorro chilla (Lycalopex griseus), huillín, nutria de río (Lontra Provocax).
«Pumas» pintura realizada por Elvira Henríquez«Zorro» pintura realizada por Elvira Henríquez
Comunidad de reptiles
En la comunidad de reptiles se encuentran especies como: culebra de cola larga (Philodryas chamissonis), culebra de cola corta (Tachymenis chilensis), lagarto chileno (Liolaemus chiliensis), lagartija de vientre azul (liolaemus cyanogaster), lagartija pintada (Liolaemus pictus), lagartija lemniscata (Liolaemus lemniscatus), lagartija esbelta (Liolaemus tenuis), gruñidor del sur (Pristidactylus torquatus), lagartija de Schröeder (Liolaemus schroederi), lagartija de vientre anaranjado (Liolaemus pictus).
Comunidad de anfibios
En la comunidad de anfibios se encuentran especies como: ranita de darwin (Rhinoderma darwinii), sapo de barros (Alsodes barrioi), rana arbórea (Hylorina sylvatica), rana moteada (Batrachyla leptopus), sapo de cuatro ojos del sur (Pleurodema bufoninum), sapo de cuatro ojos del norte (Pleurodema thaul), rana de ceja (Batrachyla taeniata), rana chilena (Calyptocephalella gayi).
«Sapito de cuatro ojos» Dibujo a lápiz por Daniela Fuentes
Aquí te presentamos una selección de las diversas actividades que ha gestionado el Colectivo Social Salvemos el río Renaico y los eventos donde ha participado representando al Museo Comunitario del Agua, río Renaico:
Jornada cultural y muralista: Día del río Renaico. 10 de diciembre del 2022
Cientos de personas participaron en actividades desarrolladas para conmemorar la séptima versión del Día del río Renaico y el noveno aniversario del Colectivo Social Salvemos el río Renaico, realizadas el pasado sábado 10 de diciembre de 2022 en el balneario de Renaico.
Muralistas de Valparaíso, Concepción, Kiriwe, Angol, Los Ángeles y Collipulli colorearon la playa situada a orillas del afluente. Así mismo, bandas y solistas de diversos estilos participaron de la jornada, acompañados de una feria libre, conformada por emprendedores de la comuna.
Como organización agradecemos a cada una de las personas que hicieron posible esta instancia autogestionada; artistas, feriantes, organizaciones e individualidades cooperadoras. Agradecemos especialmente a la Veterinaria Colhue, cuyo personal atendió de forma gratuita a las mascotas de la comuna.
Fangoso, sucio, húmedo: Conferencia Internacional sobre cuidado del agua,prácticas artísticas y comunidades. 12 y 13 de febrero de 2022.
Esta conferencia digital presenta distintos proyectos artísticos internacionales que lidian con la protección de las aguas en peligro. La conferencia ofrece una plataforma para el intercambio de ideas y experiencias. Se abordarán cuestiones en torno a tres temas centrales: la gestión, los aspectos políticos y las representaciones de los territorios de agua en un contexto global.
Los proyectos invitados se han desarrollado en lugares como Chile, Colombia, Alemania, India, Japón, Palestina y Estados Unidos de América. Durante las sesiones se conversará sobre prácticas artísticas y formas de colaboración para la protección del agua, así como los desafíos que esto representa. La conferencia está organizada por Citizen Art Days, una asociación de artistas con sede en Berlín, Alemania. Citizen Art Days ofrece una plataforma artística que reúne a ciudadanos, artistas y actores de la ciudad para resolver problemas concretos en el espacio público mediante estrategias artísticas.
Avistamiento de Aves y limpieza del río Renaico. 19 de junio de 2021
Se realizó una visita a “terreno” (sector balneario río Renaico), efectuándose avistamientos de aves con reconocimiento del entorno local, junto a Daniel Rivera, ornitólogo de campo.
Así mismo, se llevó a cabo una acción de limpieza de la ribera del río Renaico. Asistieron 20 personas (participantes y expositor). La moderada afluencia de público se debió a las restricciones sanitarias por la crisis pandémica. Se culminó con una pequeña intervención musical.
Museo de la Democracia. 17 de abril – 13 de junio de 2021
El Colectivo Social Salvemos el río Renaico y la artista Marcela Moraga presentan el Museo comunitario del agua en la exposición de arte “Museo de la Democracia” en Berlín. El “Museo de la Democracia” trata de una institución ficticia de conservación, exhibición y mediación de la democracia como si esta fuera un fenómeno del pasado o una especie en extinción. En colaboración con artistas, teóricos, activistas, museólogos y otros actores, el museo presenta 25 obras-dispositivos con las que intenta preservar, interpretar, exponer e imaginar diferentes reliquias de la memoria de una sociedad post-democrática. El museo de la democracia se aloja en el espacio de la asociación nGbK (neue Gesellschaft für bildende Kunst).
Educación socio-ambiental en Renaico. Juventud renaiquina por el medioambiente. 2019
El Colectivo realizó exposiciones de educación socio-ambiental en colegios y liceos de la comuna de Renaico. Se presentaron las problemáticas que enfrenta el entorno natural local, así como la importancia de la flora y la fauna nativas. En estas instancias se ha compartido trabajo con Rapaces Nahuelbuta, organización de la ciudad de Angol que trabaja, como el nombre lo dice, con aves rapaces*. Rapaces Nahuelbuta ha acercado estas aves a los niños y jóvenes mediante técnicas del arte de la cetrería – que consiste en críar, domesticar, enseñar y curar a los halcones y otras aves que cazan al vuelo.
*todo bajo reglamento y autorizaciones del SAG, Servicio Agrícola y Ganadero.
En ese tiempo cruzábamos el río en bote, nos llamaban «balseros», ganábamos buenas lucas, traíamos de allá arriba buena madera, hijo. El río era correntoso, no como ahora, que no trae na. Con eso tu mamita pudo estudiar y tener ropita, no era mucho pero pucha que servía. La gente nos esperaba por allá en la orilla, donde vivía tu tío antes, y nos encargaba leña, aunque nosotros hacíamos de todo. Ser balseros era como ir a pescar. Mi viejito nos enseñó de todo, siempre nos decía: «Si no saben lo básico, cómo esperan sobrevivir». Muy sabio mi viejo.
Nacer y Morir
por Hans Ross S.
Naces, en la cordillera de Pemehue, bajas bordeando el Motrulo, hasta encontrarte con el diablo, forman uno solo y avanzan por Malleco, visitas al amargo y lo invitas a pasear, te haces cada vez más y más grande, saludas a Mulchén, Collipulli y Renaico. Para en este último, besar al Vergara, y dejar la Araucanía para jamas volver, depositando tu confianza en el Bio Bio y que este te lleve al paraíso, a aquel anhelo que tienes desde nacimiento, en donde todo es azul, y la nada misma se pierde en el horizonte, solo hay sol, donde solo existe mar.
Río Renaico
por Darwin Osorio
Hijo de Pemehue, nieto de los Andes.
Tolhuaca te despide
de recorrido y trayecto
pasando por pueblos y personas que
ofrendan tu curso.
Vergara te recibe fraterno, festivo,
y de la mano y escoltado
el Bio Bio
te lleva al mar
a descansar y resucitar
en el nombre del agua.
Los hermanos de Wallmapu,
de origen y descendencia
te llamaron Rigaico:
agua de pozo o que hace pozos.
Las comunidades originarias,
examinaron tu naturaleza
de mitos y leyendas
esparcidas en racimos de voces.
El tiempo precipitó
y tu nombre fue otro;
aquel que cabalgo errante
sobre aquellos que pactaron
comunión,
pero tu alma siguió incólume, intacta
como tus primeros
y últimos años venideros:
rebosante de días,
imperecedera, comprometida,
unida al imperio del sol,
donde los vientos se juntan a conversar
de espigas fugaces, arreboles etéreos,
colibries sublimes,
bandurrias sagradas
y nubes embarazadas.
Estirpe ancestral
entre Biobio y Araucanía.
Guerrero tempestuoso, metalico.
Torrente fluvial
labrador de corrientes y riberas
remanso de multitudes
desembarco
y ocaso de amores,
de atardeceres abandonados
en medio de la soledad
recóndita y ensimismada.
Las lluvias que to abrigan
recorren las hebras de tus arterias
limpiando heridas y cicatrices
que el tiempo ha socavado
y las personas no han de curar.
Tu historia,
es el campo abierto
sus fronteras abundantes
y sus pobladores
que tomaron tus venas
donde germino la semilla de sed
y agua derramada,
hasta poblar el silencio
de lenguajes, metaforas y reuniones.
Tu historia,
es la inocente
y blanca infancia
de niñas y niños
que jugaron en tu regazo
con la promesa de ser adultos,
mientras tus brazos
cobijaron sus sueños, escaleras y esperanzas.
Tu historia,
tu largos años pasados
presentes y distantes
fueron mujeres y hombres
libres del tiempo consumado
como tu espíritu salvaje,
indómito e inmortal
que persiste
en las entrañas de tu sima.
Tus puentes,
cómplices y testigos,
vigilan tu caudal y eternidad,
como faroles recostados
que anuncian la llegada
de veraneantes y comitivas.
A veces los trenes
y los autos más seguidos,
atraviesan tu morada y territorio,
autorizados por hecho,
mientras los giravientos,
mudos y telescópicos,
contemplan tu geohidrografía
y tus dominios perpetuos.
Los árboles y su casta,
aves, peces, pájaros
y animales,
conocen tu idioma
transparente, sonoro
diáfano y eléctrico,
cuando transitas, viajas o caminas
de un lugar a otro
a quien sabe dónde
sin paradero y estación alguna,
entregando tus dones
encomendados al aire y el vacío.
Llevas la cruz
de aquellos que
duermen sobre tu lecho,
sin aviso, cegados por el destino,
acompañando tus noches
cuando la soledad embarga
y tu retiro se desprende
de la luz apagada.
Te conocí sin latidos
sin pasos y memoria adentro:
aun de huellas ninguna.
Imposible revertir la ausencia
de fragmentos y recuerdos.
Lejano y distante, mi voz
se fue haciendo espacio
entre tus dominios vitales
antes de nadar en tu estancia,
hasta que mi voz te Ramo Renaico.
De silencio tímido y asustado de asombro
te hable de sueños azules
tierras fértiles, campos floridos
promesas grises y pupilas enamoradas
como el niño que impulsa
su primer amor anudado.
Sin nombres y direcciones
jugaste a ser amigo y confidente.
Te mostré mis anclas varadas
y las alabanzas desnudas
empeñado en recoger tus virtudes y proezas
como un aprendiz de filosofía
que emprende el viaje y retorno.
Te visite hipnotizado y sonámbulo
guiado por los árboles y sus copas.
De día, de tarde y de noche
alumbraste mi alma y sus constelaciones
en un pacto estelar y migratorio,
y, aquella tarde desesperada,
cuando el amor se había ido,
me escribiste
el primer verso con forma de mujer
y el poema terminó sumergido
en un rincón de tus aposentos
mientras mi llanto volvía a tu caudal
aferrado a tu cintura.
Aprendí tu lenguaje de árboles y pájaros
que danzan y bailan contemplando
el místico recorrido de tu cuerpo
hecho plenitud,
y no hallé todo, nada o una mancha ciega
que pueda borrar todos estos años
la luz y el espejo de tu historia
de aquellos que vinieron
a encontrarse así mismos.
La artista Marcela Moraga llegó a Renaico el año 2016 gracias a una beca de arte colaborativo organizada por el programa Red Cultura. En el marco de esta residencia, Marcela compartió con el río Renaico, con los miembros del Colectivo social Salvemos el río Renaico, con jóvenes del programa Servicio País y con diversas organizaciones de vecinas y vecinos. En estos encuentros y conversaciones surgieron las ideas para producir las actividades artísticas y el documental “Salvemos el río Renaico“, que forman parte de la colección del Museo comunitario del Agua.
La artista sigue comprometida con los jóvenes del Colectivo y con la defensa del río. Ha presentado la problemática del río Renaico y la colección del Museo en diferentes eventos de arte y ecología.
El archivo del Museo Comunitario del Agua ubicado en esta plataforma virtual ha sido posible gracias a los aportes de las y los siguientes artistas:
Fotografías: Hans Ross – Gráfica: Rodrigo Prado – Música: Weychan feat RIGO Pinturas: Elvira Henríquez y Roberto Flores – Dibujos: Daniela Fuentes y Rodrigo Prado – Muralismo: información detallada en post «Muralismo»
La flora y la fauna que habitan en un territorio no solo tienen sentido en dar belleza al paisaje, sino que también cumplen funciones esenciales en cada uno de los ecosistemas en los que viven. Cuando comenzamos a reconocer cada forma de vida en nuestro entorno, no solo nutrimos nuestro conocimiento de la naturaleza, sino que también logramos comprender mejor nuestro territorio y enriquecer nuestra identidad.
A orillas del río Renaico, ubicado en la comuna del mismo nombre, se hallan bellos y variados ecosistemas que brindan escenarios perfectos para pasear en familia. Así mismo, para hallar interesantes especies de aves cuyas poblaciones han disminuido notoriamente a causa del ser humano. Aun así, resisten gracias a todo lo que la cuenca del río Renaico entrega. Su recorrido de este a oeste no es menor, por lo que la diversidad de aves que podemos encontrar en su ribera es bien variada, recibiendo o despidiendo algunas especies según la estación del año.
Mirlo, pintura de Roberto Flores
La ribera del río Renaico brinda refugio y alimento a algunas especies como el martín pescador (Megaceryle torquata stellata), la garza cuca (Ardea cocoi), la garza grande (Ardea alba), el churrete (Cinclodes patagonicus), y el pato anteojillo (Speculanas specularis). Estas aves pasan gran parte del tiempo en la ribera o en el agua misma, siendo importantes reguladores de poblaciones de invertebrados, anfibios y peces presentes en el río. Además de esto, algunas destacan por su belleza, como lo es el caso del martín pescador, un ave muy atractiva y de gran interés para quienes practican el avistamiento y la fotografía de aves, por lo que estas especies también podemos considerarlas como un importante atractivo turístico para la comuna.
Martín Pescador, pintura de Rodrigo Prado
Pato Jergón Grande, pintura Mural de Roberto Flores
En los ecosistemas adyacentes a la cuenca podemos encontrar algunos humedales que mantienen vida durante todo el año. Las especies que residen en este tipo de espacios guardan una estrecha relación co-evolutiva con el resto de las formas de vida que hay allí, por lo que la inminente desaparición de estos sitios no solo podría afectar la supervivencia de una especie, sino que de varias. Así es como podemos encontrar aves como el run run (Hymenops perspicillatus), el bailarín (Elanus leucurus), la bandurria (Theristicus melanopis) y el treile (Vanellus chilensis) frecuentando los espacios que brindan estos terrenos húmedos, en donde no solo encuentran su alimento, sino que también son excelentes sitios para criar a su descendencia.
En el trayecto de este afluente también se hallan numerosas vegas que poseen las características ideales para que aves como el pequén (Athene cunicularia) puedan localizar una madriguera en donde refugiarse. La perdiz chilena (Nothoprocta perdicaria), el zorzal (Turdus falklandii) y la tórtola (Zenaida auriculata) son algunas de las especies que existen en estos sitios. Sin duda alguna, la mayor variedad de aves se da en el grupo de las paseriformes – aquellas que comúnmente llamamos “pájaros” y que tienen pequeño tamaño, grandes alas y patas de cuatro dedos. Entre ellas, se cuentan aquellos que se mueven en grandes bandadas y que en primavera deleitan con su canto a cualquier persona que las pueda contemplar por un momento: la diuca (Diuca diuca), el chincol (Zonotrichia capensis chilensis), la loica (Leistes loyca), el chirihue común (Sicalis luteola), el tordo (Curaeus curaeus) y el jilguero (Spinus barbatus).
A pesar de la continua intervención humana que se ha dado en este río, aún se conservan algunos relictos de bosque nativo, generando algunos parches de estos importantes ecosistemas boscosos en los que habitan especies como el concón (Strix rufipes), el peuquito (Accipiter chilensis), el aguilucho de cola rojiza (Buteo ventralis) y el aguilucho chico (Buteo albigula), quien llega de visita todos los veranos. Estas aves rapaces, a pesar de ser especies diferentes entre sí, comparten una característica: son especialistas del bosque. Esto quiere decir que su relación con el bosque nativo es mucho más estrecha que en comparación con otras aves. Por eso es que es muy importante proteger y restaurar el bosque nativo de la cuenca del río Renaico.
Colibrí o picaflor chico, dibujo de Rodrigo Prado
La presencia o ausencia de estas aves es un claro indicador de la salud del ecosistema, ya que al ubicarse en la cima de las tramas tróficas – que se relaciona con la red alimentaria de las especies -, cumplen la importante función de regular las poblaciones de aquellos organismos que forman parte de sus dietas.
El río Renaico es el hogar de una rica biodiversidad que necesita urgentemente ser protegida, puesto que el avance del extractivismo sobre este territorio ha ido cambiando súbitamente la configuración del paisaje. Es importante que la comunidad demuestre interés en conocer la vida silvestre de esta cuenca, ya sea por iniciativas propias, así como por las de organizaciones de la sociedad civil como el “Colectivo social Salvemos el río Renaico”.
Cuidar nuestro entorno es una tarea de todas y todos. Cuando conocemos en detalle lo que en él habita, entendemos que hay motivos de sobra para preservarlo para las futuras generaciones.
Los murales en la comuna de Renaico nacen con la finalidad de cubrir aquellas murallas manchadas por el desgaste de los años o rayadas con letras o formas sin sentido, además de embellecer y fomentar el libre desplazamiento por nuestro pueblo. Gracias a ellos, podemos disfrutar de una caminata alegre y colorida en donde se pueden observar y disfrutar distintos tipos de arte e ilustraciones. El enfoque es el mismo en la mayor parte de estas pinturas en los muros: rescatar la historia del pueblo desde sus inicios, la de presentar la flora y fauna presentes en Renaico y sus alrededores, promover el cuidado, resguardo y respeto por el medio ambiente y nuestro territorio; plasmar también la identidad de quienes habitamos este lugar.
Las diversas galerías de arte al aire libre que se encuentran en Renaico han sido realizadas por diversas individualidades como también organizaciones. Entre ellas destacan el Colectivo Artehaga, artistas y muralistas de la ciudad de Concepción, como también Pablo Antay, muralista de la ciudad de Angol; Nicolás (Sark Pewün) desde Concepción, Gabriela Vivart, quien fuese la encargada de darle vida al “Museo al aire libre” en Renaico bajo la dirección e idea de la periodista y gestora cultural Lorena Pedreros, procedente de esta localidad. El “Museo al aire libre” potencia la flora, fauna e historia de nuestra comuna. También hemos de destacar a Roberto Flores (Ñanku pintor) de la ciudad de Los Ángeles, y a Cristian Gutiérrez, artista y pintor oriundo de Renaico, al igual que Jorge Zerené, también renaiquino.
Son muchas y muchos más las y los artistas que colaboran en la ardua tarea de crear espacios de restauración y educación en las murallas de Renaico que, mediante la pintura y los colores, intentan reflejar distintas realidades, enseñando y fomentando un buen vivir; entregando mensajes diversos para un futuro mejor.
El caudal del río Renaico es del tipo pluvial, esto quiere decir que su mayor fuente de alimentación son las lluvias y precipicationes, por lo que su volumen aumenta durante el invierno. Tradicionalmente, el clima de esta región es del tipo templado oceánico lluvioso, esto quiere decir que las estaciones son bien diferenciadas: llueve bastante durante el invierno y esporádicamente en verano. Pero esta región, como todo el país, está afectada por una sequía que lleva catorce años consecutivos. Los veranos son cada vez más largos, calurosos y secos; los inviernos cada vez más cortos y secos.
Las aguas del río Renaico son extraídas principalmente para el desarrollo de la industria forestal y para el riego de extensos predios agrícolas. En menor medida, las aguas están destinadas al consumo humano y al riego de cultivos de los pequeños campesinos. Dichos usuarios están organizados en lo que en Chile se llama Asociaciones de Agua Potable Rural (APR) (1).
(1) Asociaciones de agua potable rural (APR): se trata de organizaciones sociales reconocidas por la institución estatal, quienes operan y administran los servicios de agua potable y sanitarios en un área geográfica delimitada. https://doh.mop.gob.cl/SSR/index.html
La palabra Renaico viene del mapudungun (o mapuzungun) “Renaiko”, lengua del pueblo mapuche.
A continuación presentamos interpretaciones y traducciones de la palabra al idioma español de manera simple, comprendemos que es muy complejo “traducir” una lengua indígena por la diferencia cultural y concepción del mundo que esto implica en la vivencia de una lengua.
Para Juan Ñanculef, lingüista mapuche que investiga el mapudungun, la palabra Renaiko está compuesta por dos palabras: Renai y Ko. Renai traducido al español, es un verbo que expresa el brotar de mucha agua de forma natural, o sea sin intervención de nadie, y ese brotar es horizontal. La palabra Ko se traduce como agua.
El “brotar de mucha agua” en este territorio tiene mucho sentido, porque el río Renaico se asocia a diversas formaciones hídricas, tales como el río Negro, el río Amargos, el río Vergara, el río Mininco, el estero Tijeral, la quebrada Infiernillos, el estero Quilquihuenco, el estero Huapitrio, entre otras.
Otra teoría sobre el origen de la palabra Renaico se encuentra en el llamado Grafemario Azümchefe (1), un sistema de escritura del mapudungun. En este grafemario, la palabra Renaico se traduce al español como “agua de cueva, de vertiente, o de manantial”. Esto, a raíz de que en la época de la ocupación de la Araucanía llevada a cabo por Cornelio Saavedra, los mapuches se refugiaban o instalaban sus hogares en cuevas formadas en la ribera del río. Por otra parte, se relaciona la palabra “cueva” al río Renaico, ya que en la cosmovisión mapuche, los Ngen – Ko (2) habitan las cuevas formadas bajo el río. Los Ngen – Ko se traducen al español como espíritus del agua.